Las experiencias del humano contemporáneo son múltiples y de lo más insospechadas gracias al desarrollo de la medios y las tecnologías de comunicación. A veces no necesitamos estar en un lugar ni siquiera estar en el mismo tiempo en el que suceden las cosas para ser testigos de un suceso. No es complicado Laika y contándote lo que me ha pasado hoy en la tarde lo entenderás mejor. Estaba haciendo zapping con los canales y me detengo en uno al ver a un toro herido, lleno de estacas en el lomo y me quedé paralizada, mientras escucho a mi madre decir que no vea eso y pase de canal. Pero me quedé porque pensé que era un canal peruano, que era la Plaza de Acho pero no, me equivoqué era en otro lugar, cuando en la pantalla veo al hombre que llaman torero alzarse con una espada en la mano y hundirla completa en el cuerpo del animal. Atónita veo que el toro no cae y veo también como dos hombres vestidos con un gorro que me recuerda los gorros del ratón Mickey con unas capas rosadas alternando y llamando la atención al pobre animal ensartado con la espada y con los zarcillos que le colgaban del cuerpo ensangrentado. No moría y pasó lo increíble. Otro hombre se acerca y le saca la espada y se la dá al hombre, al matador de toros y lo que creí inconcebible pasó, se la volvió a meter en el cuerpo toda entera otra vez¡. Sentí que la pantalla se acercaba a mí difuminándose, sentí frío, deseos de llorar y recordé que en la mañana en medio de una conversación sobre los animales me preguntaron "porque el animalismo no pegaba..." mientras veo a los mismos hombres de la capa rosada acorralar al toro, marearlo, y veo a un tercero venir con una daga corta muy gruesa y brillante acercarse al animal que ya está de rodillas. Veo al torero caminar con los brazos en alto saludando al público en tanto la pantalla enfoca a unos niños con sus padres que están viendo en las gradas este horrible espectáculo, a los vendedores de algo, a lo lejos oigo a los locutores, veo la Plaza, la gente y pienso que hay toda una serie de relaciones y formas de ganarse la vida que tienen como centro un animal torturado al exceso, hasta que muera sino a la primera a la segunda o al infinito no importa siempre que muera. La pregunta de la mañana iba dirigida a saber porqué era tan díficil reconocerles sus derechos a los animales ya tiene su respuesta. Los resultados de las relaciones entre hombres y animales son de ganancia para el humano que asegura su supervivencia mientras que para el animal es la pérdida de su vida, es decir la muerte y esto sin apelación posible. Incluso la imagen que encontré en Wikipedia commons hecha por Stuart Yeates resume con gran fuerza dramática la tragedia que es la vida de estos animales en nuestras sociedades ¿Sabes Laika? hoy no quise quedarme con esto sola, por eso lo escribo en nuestro blog para salir del silencio y pedir una mirada amorosa a los animales porque ellos también sienten...porque ellos también tienen derecho a la vida...
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